Hello, Upper East Siders… (o donde quiera que estéis leyendo esto) 👀✨
Confesión del mes: estoy hasta el cuello de obsesiones… pero dime tú, ¿quién no lo estaría con el verano recién estrenado y el aire oliendo a nuevas tentaciones? Si algo te gusta, no lo pienses: add to cart. Porque las rebajas arrancan el viernes y ya sabes lo que eso significa... adiós a tus favoritos. ¿Lo dudas? Déjalo en la wishlist y cruza los dedos. O no digas que no te avisé.
Amiga, aquí te dejo los enlaces a las prendas y productos.
Dicen que ser deseada es un poder. Pero saber lo que vales... eso es imparable.
Esta semana entramos al mindset de la Sirena: magnética, sensual y con cero ganas de pedir disculpas por brillar.
Samantha Jones no solo conquistó Nueva York. Redefinió lo que significa ser una mujer libre, segura y que no teme desear (ni hacerse desear). Aquí te dejo unas lecciones de la reina de Sex & The City que todas nos deberíamos grabar a fuego.
🙋🏼♀️ Behind the Scenes:
📍Ubicación: en Ibiza con amigas ✨
🧠 Mood:
🚩 Red flags que Samantha jamás ignoraría:
Queridos lectores, amigas 💌
Hay mujeres que coleccionan bolsos. Otras, red flags.
Samantha Jones no era una de ellas.
🚩 Red flags que Samantha jamás ignoraría:
1. “Te estás tomando esto demasiado en serio”
No, querido. No me estoy tomando nada demasiado en serio. Me estoy tomando a mí misma en serio. Y eso te incomoda.
2. Cancelaciones de última hora (sin disculpas reales)
Si no tiene tiempo para ti, no lo fuerces. Samantha lo tenía claro: “Si no te prioriza, que no te confunda.”
3. Comentarios que suenan a “te estás arreglando mucho para salir”
Exacto. Porque tengo un plan: pasármelo bien. Y verte no es el punto fuerte del día.
4. “No quiero etiquetar lo nuestro”
Perfecto. Yo tampoco. Me etiqueto sola: INDISPENSABLE.
5. Ghosting emocional
Presente físicamente pero a mil kilómetros mentalmente.
No, gracias. Samantha no perdía tiempo en traducir silencios.
6. Quien no celebra tus logros
Si tienes que hacerte pequeña para que el otro no se sienta inseguro, la respuesta es fácil: next.
Soltar una red flag no siempre es fácil. A veces confundimos el apego con amor, las mariposas con ansiedad, o la intensidad con conexión. Pero hay una verdad que nunca falla: si algo te hace dudar más de ti que del otro, no es ahí. Si te encuentras justificando lo injustificable, apagándote para no molestar, o esperando migajas disfrazadas de promesas, te estás alejando de ti misma.
Samantha no se quedaba donde no se sentía libre, vista o celebrada. Y tú tampoco tienes por qué hacerlo. Porque el amor, el bueno, el que suma, no duele ni te hace chiquita. Te acompaña, te eleva y te deja espacio para seguir siendo tú.
Esta no es una invitación a endurecerte, sino a recordarte que eres suficiente, ahora mismo, sin tener que probar nada. Y si hay una red flag que ya estás viendo pero aún no has soltado, hazlo como lo haría Samantha: con seguridad, con estilo y sin mirar atrás.
Nos leemos en el próximo capítulo.
XOXO,
Marta
💌 Gracias por leerme, si te gusta mi contenido puedes darle like (incluso aunque no tengas Substack), saber que os gusta es el motor de todo esto 💖.
Facto de factos: “si algo te hace dudar más de ti que del otro, no es ahí.”
Domingo feliz de encontrar tu entrada llena de recomendaciones maravillosas y pensamientos para la vida. 💓
“Con seguridad, con estilo, sin mirar atrás”, excelente quote.